Desarrollado en 2011 como un fork de la red Bitcoin, Litecoin (LTC) tenía como objetivo mejorar las deficiencias de Bitcoin. Fue la primera altcoin, y su meta era ofrecer una moneda descentralizada de igual a igual (P2P) con tiempos de procesamiento de transacciones más rápidos y tarifas más bajas que Bitcoin.
Construido con los pagos en mente, Litecoin supera a Bitcoin en términos de velocidad de transacción y confirmación. Mientras que Bitcoin puede procesar aproximadamente cinco transacciones por segundo, Litecoin tiene una capacidad de 56 transacciones por segundo. El tiempo de confirmación de la red también es significativamente más corto, tomando aproximadamente dos minutos y 20 segundos en comparación con los casi 10 minutos de Bitcoin por bloque.
Incluso después de más de una década, Litecoin sigue comprometido a ofrecer a los usuarios soluciones de pago de bajo costo, privadas, seguras y sin fronteras. Su visión es permitir que las personas realicen pagos en cualquier parte del mundo en cualquier momento, convirtiéndola en una moneda digital práctica y accesible para transacciones cotidianas. La adopción de Litecoin como método de pago ha crecido a lo largo de los años, siendo ampliamente aceptada por varios comerciantes y organizaciones, incluyendo la Cruz Roja Americana, Newegg y Twitch.